ha lanzado la duodécima entrega de MasterChef, su programa culinario estrella. Una vez más, Samantha Vallejo-Nágera, Pepe Rodríguez y Jordi Cruz regresan como los exigentes jueces encargados de seleccionar a los mejores contendientes que mostrarán sus habilidades culinarias en la cocina.
La temporada comenzó con 50 aspirantes a chefs compitiendo por un codiciado lugar en la competencia. Entre ellos, estuvieron representados una amplia gama de orígenes, desde el guitarrista de Mónica Naranjo hasta el director de una empresa de cocina centrada en dietas que anteriormente atendía a Elsa Pataky y Chris Hemsworth. Cabe destacar que Idoia, hermana de Amaia Montero, estaba entre las aspirantes que buscaban impresionar a los jueces y asegurarse su lugar en la competencia.
La hermana de la artista del jueves compartió su deseo de explorar nuevos caminos en la vida después de incursionar en el estilismo. Intrigada, Samantha Vallejo-Nágera investigó más y preguntó sobre su clientela anterior. “Solo mi hermana. Soy la hermana de Amaia Montero”, respondió la concursante.
Al observar el sorprendente parecido de Idoia con el ex cantante de La Oreja de Van Gogh, los jueces quedaron impresionados. “Es fantástica”, remarcó Pepe Rodríguez, expresando su admiración por la música de la artista. Sin embargo, el humor cambió cuando probaron el plato que ella había preparado.
Veo tu pasión y habilidad. Tienes mi voto sí”, afirmó Samantha. El chef invitado Marcos Morán también reconoció el talento de Idoia pero destacó su familiaridad con el plato. Yo me inclino a decir que sí, aunque está claro que tú has preparado este plato. en numerosas ocasiones”, comentó.
Con dos votos positivos, Idoia quedó a punto de recibir el ansiado delantal blanco. Sin embargo, Pepe y Jordi tuvieron las votaciones decisivas. “Me gustaría decirte que sí, pero no puedo. Has explorado varios caminos, pero ninguno parece resonar contigo. No siento el verdadero deseo de dedicarte a la cocina”, expresa Jordi, débilmente. sonrisa en sus labios. Sin inmutarse, Idoia aseguró al chef catalán sus aspiraciones. “Por favor, Pepe”, imploró, tratando de influir en su decisión.