Los espectadores que sintonizaron el lunes el estreno de la duodécima temporada de Masterchef se llevaron una sorpresa cuando uno de los candidatos finales al casting entró en la cocina con el objetivo de hacerse con un puesto muy codiciado para la temporada. Esta concursante inesperada fue Idoia, la hermana de Amaia Montero.
Idoia apareció en el programa con la aspiración de trazar un nuevo rumbo en su vida, habiendo ejercido anteriormente diversas ocupaciones, incluida la de estilista. Cuando los jueces preguntaron sobre sus colaboraciones destacadas, ella aprovechó para revelar su identidad. “Sólo mi hermana. Soy hermana de Amaia Montero”, desveló. “Un talento notable”, respondió Pepe Rodríguez, reconociendo los logros pasados de Amaia como ex vocalista de La Oreja de Van Gogh.
Samantha Vallejo-Nágera expresó su apoyo a Idoia reconociendo sus aptitudes culinarias. “Es evidente que tienes facilidad para ello y lo disfrutas”, comentó. De igual forma, Marcos Morán, quien funge como juez invitado del primer episodio de Masterchef 12, también dio un voto positivo. Sin embargo, Jordi Cruz y Pepe Rodríguez acabaron con sus votos las esperanzas de Idoia. “Me gustaría decir que sí, pero no puedo. Has explorado varios caminos, pero ninguno parece resonar contigo. No siento el deseo genuino de dedicarte a la cocina”, explica Jordi.
“Por favor, Pepe”, suplicó Idoia, esperando conseguir el tercer voto necesario para convertirse en concursante oficial del programa de TVE. “Masterchef te cambia la vida. Siempre lo decimos. Pero creo que aún falta más desarrollo”, remarcó Pepe. “Me hubiera gustado avanzar. Pero no intentarlo es fracasar, por eso estoy contenta”, comentó Idoia antes de partir, incapaz de cumplir su sueño de incorporarse al programa.