El Athletic Club se marcha con frustración tras un partido en el que no logró crear suficientes oportunidades contra el RCD Mallorca el lunes por la noche. Los aficionados del Son Moix disfrutaron del esfuerzo y la sólida defensa de su equipo.

Los Bermellones comenzaron bien, con Vedat Muriqi teniendo la mejor ocasión del encuentro, pero su disparo fue bloqueado por una gran parada de Julen Agirrezabala a corta distancia. Sin embargo, el juego dio un giro importante en el minuto 23, cuando Samu Costa recibió dos tarjetas amarillas. Esto marcó el tono del partido, con el Athletic controlando la mayor parte del balón a partir de ese momento.

El equipo vasco creyó haber anotado poco antes del descanso cuando Iñaki Williams centró y Nico Williams cabeceó tras una desviación de Dominik Greif. Sin embargo, el gol fue anulado ya que el balón había cruzado la línea antes de que el mayor de los Williams llegara a él. Poco después, otro gol de Iñaki fue anulado por fuera de juego.

La frustración de Ernesto Valverde radica en que su equipo no pudo abrir el juego ni crear muchas ocasiones pese a tener un hombre más, hasta los últimos 15 minutos del partido. Su mejor jugada llegó cuando Nico Williams envió un disparo al travesaño y el rebote de Álex Berenguer se fue por poco. Un último intento de Ander Herrera también se fue fuera, mientras el tiempo se agotaba.

Mallorca celebró el punto al final, mientras Valverde mostraba una expresión claramente molesta. El equipo de Jagoba Arrasate permanece igualado en puntos con el Athletic, ocupando la séptima posición por diferencia de goles, mientras que Los Leones están en el quinto lugar, separados de Real Betis. Podrían haberse puesto a la par con el Atlético de Madrid en cuarto lugar si hubieran encontrado el gol, pero aún están a solo tres puntos de distancia del Villarreal en el tercer puesto.