El fabricante de electrodomésticos BSH ha tomado la difícil decisión de cerrar su planta en Esquíroz, Navarra. Esta noticia ha dejado a 660 trabajadores en un estado de incertidumbre, ya que el cierre está programado para junio de 2024. La compañía justifica esta acción por la falta de competitividad de la planta, un vistazo a la dura realidad que enfrentan muchas industrias en el mundo actual.

Una planta que emplea a muchos

La planta de BSH en Esquíroz no solo ha sido un lugar de trabajo para los empleados, sino que también ha formado parte esencial de la comunidad de Navarra. De los 660 trabajadores, 500 están en producción y 110 en oficina. Sin embargo, el futuro parece sombrío tras el anuncio del cierre.

• Cierre programado: Previsto para junio de 2024.
• Empleados afectados: 660 en total.
• Producción: Frigoríficos y lavavajillas compactos.
• Negociaciones: La empresa discutirá un ERE que afectaría a 655 empleados.

Reacciones de los trabajadores y sindicatos

Los trabajadores se llevaron una gran sorpresa, ya que muchos se enteraron de la noticia por la prensa o por correo electrónico. Los sindicatos han reaccionado fuertemente, acusando a BSH de deslocalizar la producción a otros países como Polonia y Turquía, donde los salarios son más bajos.

Movilizaciones en marcha

Ante esta situación crítica, el comité de la planta ha decidido movilizarse. Se están organizando concentraciones y manifestaciones para mostrar su descontento y exigir que se reconsidere el cierre de la planta. Este miércoles, se realizará una concentración ante el Parlamento de Navarra, y el sábado se llevará a cabo una manifestación en Pamplona con el lema “BSH no se cierra, por la industria navarra”.

• Concentración: Este miércoles ante el Parlamento de Navarra.
• Manifestación: El sábado en Pamplona.
• Reclamaciones: Implicación del Gobierno de Navarra.

La respuesta del Gobierno de Navarra

El Gobierno de Navarra también ha reaccionado ante este anuncio. La presidenta, María Chivite, ha calificado la decisión como “inesperada” y ha enfatizado que priorizan la situación de los trabajadores. Se espera que el consejero Mikel Irujo solicite una reunión con la dirección de BSH para discutir este asunto y buscar posibles soluciones.

El contexto del cierre

A pesar de que BSH ha reportado buenos resultados financieros en años recientes, con beneficios de 60 millones de euros en 2023, la falta de competitividad ha llevado a la empresa a tomar esta difícil decisión. Este cierre no solo afectará a los empleados directos, sino también a muchos otros que dependen indirectamente de la planta.

Futuro incierto para muchos

El anuncio de BSH de cerrar la planta de Esquíroz subraya los desafíos que enfrentan los trabajadores en la industria. Muchas familias ahora están preocupadas por el futuro y se preguntan qué sucederá con sus empleos. La próxima semana será crucial, no solo para los empleados de BSH, sino también para el futuro de la industria en Navarra.