La policía de Cataluña, los Mossos d’Esquadra, informó el jueves que habían desmantelado una red que presuntamente falsificaba obras del artista callejero británico Banksy, y luego las vendía en todo el mundo por hasta 1.500 € cada una.
Los agentes arrestaron a dos personas en la ciudad de Zaragoza, en el noreste de España, donde supuestamente se fabricaban las falsificaciones. Otras dos personas, con conocimiento del mundo del arte, son sospechosas de haber puesto las obras a la venta, según declaró la policía en un comunicado.
Se sospecha que la banda vendió al menos 25 obras, creadas con pintura en aerosol sobre cartón, en tiendas especializadas, casas de subastas en Barcelona y a través de internet, a clientes en Alemania, Escocia, España y Estados Unidos.
La red falsificaba certificados que afirmaban que las obras habían sido creadas por Banksy como parte de su proyecto “Dismaland”, una exposición temporal que imitaba un parque temático sombrío, instalada en 2015 en Weston-super-Mare, una ciudad costera cerca de Bristol, lugar de origen de Banksy en Inglaterra.
La exposición, etiquetada como “la atracción turística más decepcionante del Reino Unido”, presentaba un castillo de cuento de hadas en ruinas, rodeado por un foso de agua turbia, y barcos en miniatura navegando en una piscina llena de refugiados.
La policía indicó que comenzaron a investigar el caso el año pasado, tras detectar la venta de varias obras falsas de Banksy. En diciembre, descubrieron el taller en Zaragoza donde dos “jóvenes seguidores del arte urbano de Banksy que atravesaban dificultades económicas” crearon las obras, según el comunicado.
La investigación sigue abierta, y la policía no descarta realizar más arrestos.
Banksy, cuya identidad nunca ha sido revelada, es famoso por sus murales irónicos en lugares inesperados. Sus obras, que se han encontrado en ciudades como Londres, Nueva York, Cisjordania y Gaza, se han convertido en piezas muy codiciadas en el mundo del arte que él mismo satiriza.